Conversaciones XY: El Universo
CONVERSACIÓN ENTRE «X» E «Y» SOBRE EL UNIVERSO
X: El universo es finito. La idea de infinitud, o de algo infinito, no es una idea en sí misma, no puede definir nada, pues en todo caso es la idea de una idea ¿Cómo te puedes imaginar algo que sea infinito? ¿Acaso tu mente puede poner en imágenes un universo infinito? Es imposible que el universo sea infinito, pues entonces no tendría fin ¿Cómo no va a tener fin el universo?
Y: Te equivocas. El universo es infinito. Coincido contigo en que la idea del infinito es una abstracción, un querer ser y no poder, un concepto para definir algo que nuestra mente no puede abarcar, pero dime sinceramente: ¿acaso tu mente puede poner en imágenes un universo finito? Si es finito es que tiene fin; entonces ¿qué hay al otro lado? ¿Puede haber algo más allá de ese límite, algo más allá de un universo finito?
X-Y: Mmmm…Pues si el universo no puede ser ni finito ni infinito, entonces…¿en qué quedamos? Porque las dos cosas son incompatibles…¡vaya dilema!
Ademar de Alemcastre: Disculpen ustedes, voy a entrar en la conversación.
X-Y: Adelante y bienvenido.
Ademar: Gracias. Sólo quiero hacer un comentario al margen de su importante discusión, pero en cierta medida relacionado con ella y que hoy, día 31 de Diciembre de 2009, considero apropiado realizar.
X-Y: Usted dirá…
Ademar: Hace nada estábamos celebrando la entrada en el nuevo milenio. Ahora han pasado ya diez años. Así, sin quererlo, ya hemos llegado a la primera década del Siglo XXI.
X-Y: Sobre el tiempo y su relatividad podríamos discutir mucho…
Ademar: Desde luego amigos, pero no me negarán que el tiempo se escurre entre nuestras manos como el agua al recogerla en un estanque ¿Para qué perderse en problemas? ¿No se dan cuenta de que todo lo malo del 2009 ha de quedar sepultado con el 2009? El próximo año será un año de grandes aventuras y tenderá a DIEZ en todos los sentidos siempre que sus sueños, finitos o infinitos, se cumplan en la medida que ustedes luchen por ellos.
X: Los sueños son finitos.
Y: Te equivocas. Los sueños son infinitos.
Ademar: Así como la dicotomía del universo es compleja, el barruntar sobre nuestros sueños también ¿Quién pone límites a los sueños? ¿La incertidumbre, la mano del hombre o una mezcla de ambos? ¿Qué porcentaje de culpa tenemos nosotros en la limitación de nuestros sueños? En la medida en que nos esforcemos por conseguirlos, le daremos la razón para este 2010 a X o a Y…
Ademar de Alemcastre les desea un valiente 2010.
Ademar, llevamos varios años en que precisamos de gente valiente. En política y fuera de ella. El arte se muere, la globalización acaba con las diferencias entre unas partes y otras del mundo. Creo que precisamos de un nuevo impulso, de alguien que nos diga qué debemos soñar. Un Obama en cada faceta de la vida. Si no, acabaremos como más de uno esta noche, rutineando en Nochevieja sin encontrar sentido a nada.
Estamos ya en el valiente 2010. Pero, ¿y el blogger?
El blogger estaba hasta arriba de trabajo. Pero ya ha vuelto.